ESPRESSO FIORENTINO
  • HOME
  • NOSOTROS
    • CONTACTO
  • COLECCIÓN CAFÉS
    • UN CAFÉ EN... >
      • MAPA
    • CAFE SOLIDARIO
  • ARTÍCULOS VIAJEROS
    • EXPERIENCIAS
    • INSPIRACIONES VIAJERAS
  • HOME
  • NOSOTROS
    • CONTACTO
  • COLECCIÓN CAFÉS
    • UN CAFÉ EN... >
      • MAPA
    • CAFE SOLIDARIO
  • ARTÍCULOS VIAJEROS
    • EXPERIENCIAS
    • INSPIRACIONES VIAJERAS

48 horas en Berlín

4/24/2016

0 Comments

 
Luis LÓPEZ GALÁN
Berlín es con toda probabilidad la ciudad más especial de toda Europa. Con todas sus cicatrices históricas abiertas, la ciudad se presenta al viajero como un amigo al que se va conociendo poco a poco para terminar embelesado por su carácter auténtico y su personalidad, tan rotunda que sale a relucir en tan solo 48 horas. Asómate conmigo a la capital alemana en dos días inolvidables...
Picture
Viajar a Berlín es un must para todo viajero que se precie. Famosa por su historia y su vida nocturna, la capital alemana es una de esas ciudades que guardan en su interior una energía particular, algo que uno puede notar nada más poner un pie en ella. Pero, ¿es posible sentir todo esto en dos días? ¡Vamos a por ello!

MOVERSE EN BERLÍN

Empecemos por lo básico: movernos de un lado a otro en la ciudad. El transporte público en Berlín es sencillo y llega a todos los puntos importantes de la capital, o al menos a todos los que queremos conocer. La red de transporte está formada por el metro (U-Nahn), el tranvía, el tren subterráneo (S-Bahn) y el autobús, y se divide en tres zonas (A - centro, B - territorio urbano, C - zonas limítrofes y aeropuertos). Merece la pena utilizar el transporte público porque con un mismo ticket podemos utilizar todos los tipos de transporte disponibles y también porque las distancias en Berlín, a pesar de que pueden cubrirse caminando, son bastante grandes y agotadoras para un par de días. Las opciones serán comprar un ticket de 24 horas ABC (7,60€) o bien adquirir la Berlin WelcomeCard (21,50€), una tarjeta turística que además incluye descuentos en las principales atracciones y museos.
Picture
DÍA 1

Berlín es una ciudad que se saborea despacio y se descubre poco a poco, sin prisas. Por eso, disfruta de todos los lugares que esta lista te ofrece pero hazlo a tu propio ritmo, deteniéndote más tiempo donde el corazón te lo pida. Esa manera es la única posible.

​Llegues en metro, en tren desde el aeropuerto o en taxi, comienza la ruta en la avenida Unter den Linden o 'Bajo los tilos', por los árboles con los que Federico Guillermo I de Brandenburgo la adornó en el siglo XVII. Lamentablemente con la construcción del metro y los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial los tilos desaparecieron, pero se replantaron en 1950 cuando la avenida quedó ubicada en el lado este del Muro de Berlín. 

Este largo bulevar es el epicentro social de la ciudad y comienza en la Plaza de París, hogar de la afamada Puerta de Brandenburgo, un auténtico icono internacional de Berlín. Construida entre 1788 y 1791 por Carl Gotthard Langhans, sus formas recuerdan a las de la puerta de acceso de la Acrópolis de Atenas y en aquellos momentos se ubicó en una de las murallas que cercaban Berlín. Hasta 1918 únicamente la familia real podía atravesarla, aunque después ha sido testigo de importantes acontecimientos históricos y culturales, como el ascenso de Hitel a canciller de Alemania en 1933, las bombas de la Segunda Guerra Mundial y hasta un concierto de U2 en el 20 aniversario de la Caída del Muro en 2009. En este lugar encontrarás multitud de organizaciones que ofrecen tours gratuitos (Free Tours) por la ciudad, ¡aprovéchalos y asegúrate de dejarles propina!

La Puerta de Brandenburgo es, además de todo lo anterior, un punto de inflexión en tu ruta, ya que a ambos lados del monumento encontrarás edificios y puntos de interés. Si continuas por la avenida Unter den Linden te toparás con la Academia de Arte, el Hotel Adlon, el Edificio de la Nueva Guardia de Berlín o Neue Wache, la plaza Bebelplatz con la estatua ecuestre de Federico II de Prusia, la Universidad Humboldt y el Museo Histórico Alemán y culminarás en el puente del castillo, que enlaza directamente con la isla de los Museos (aunque ésta la dejaremos para el segundo día). Como ves, este señorial bulevar ofrece un impresionante paseo. Si atraviesas, sin embargo, la Puerta de Brandenburgo, entrarás directamente al parque Tiegarten, una gran zona verde que alberga el edificio del Reichstag, lugar de reunión del parlamento alemán, famoso por su arquitectura y por su moderna cúpula de cristal de Norman Foster que, por cierto, se puede visitar reservando con antelación aquí.
Picture
Si te adentras en el enorme parque encontrarás la Columna de la Victoria, coronada con una estatua dorada de la Victoria alada y si, por otro lado, caminas desde la Puerta de Brandenburgo hacia la izquierda, hacia la zona opuesta al edificio del Reichstag, te toparás a la izquierda con el Monumento memorial a los judíos asesinados en Europa, el homenaje de Alemania a las víctimas del Holocausto construido entre 2003 y 2005. Se trata de un enorme espacio ocupado por 2.711 bloques de hormigón que desde fuera se asemeja a una especie de cementerio frío y gris. Cada bloque, sin embargo, tiene una altura distinta y juntos forman pasillos laberínticos para que el visitante pueda pasear entre ellos. El paseo se torna en ocasiones agobiante y en otras triste, y es que el monumento pretende hacer sentir la opresión y el sentimiento de vacío y pérdida de las personas que sufrieron los campos de concentración, la vida en un terrorífico callejón sin salida.
Picture
Una vez vivida la experiencia de este último monumento, la calle Hannah-Arendt te llevará hasta WhilehlmStrasse con la que, caminando hacia la derecha, llegarás al museo al aire libre llamado Topografía del terror o Topography of terrors, situado junto a la Cámara de Disputados de Berlín.  En el camino hay restaurantes y cafeterías y muy cerca también el Mall of Berlin, un centro comercial con múltiples opciones. 

La Topografía del terror, circundada por un tramo del Muro de Berlín todavía en pie, se asienta sobre el solar que ocupaba la sede de la GESTAPO, en cuyos sótanos se realizaban interrogatorios y torturas a los oponentes del régimen de Hitler. Se trata de un lugar cargado de historia que merece la pena visitarse con algo de tiempo para poder leer los textos y ver despacio todas las fotografías.

Muy cerca de aquí y a través de ZimmerStrasse es sencillo llegar hasta el famoso Checkpoint Charlie, sin duda el más famoso de los pasos fronterizos del Muro de Berlín entre 1945 y 1990. La historia de Berlín, como decía al principio, se va abriendo paso entre sus múltiples cicatrices calle a calle. El Checkpoint Charlie abría el paso desde la zona soviética al área controlada por Estados Unidos y hoy en día se han mantenido los carteles y señales que lo informaban y también una reproducción de la pequeña caseta de control en la que ahora a modo de show un par de soldados americanos se toman fotografías con los turistas. Este paso, volviendo a su historia, sólo podía ser utilizado por militares y miembros de embajadas y fue testigo de intentos de huida que en ocasiones tuvieron desenlaces fatales. Un museo al aire libre y también un espectáculo audiovisual recuerdan todo lo que en este punto aconteció.

​Con este punto de control fronterizo concluiremos nuestro primer día en Berlín. La zona es comercial y repleta de restaurantes y tiendas, por lo que es un buen punto para hacerlo.
Picture
DÍA 2

La mañana del segundo día en Berlín es para la llamada Isla de los Museos o Museumsinsel, por supuesto el barrio más visitado de la capital y también uno de los más hermosos. Como únicamente contamos con una mañana, lo mejor será elegir uno o dos de los cinco museos que ocupan esta isla urbana y empezar, eso sí, con la Catedral de Berlín o Berliner Dom, construida entre 1895 y 1905 y reconstruida en 1975 para reparar los daños que había sufrido durante la Segunda Guerra Mundial, algo continuo en Berlín. Para contemplarla desde fuera, sitúate en el parque aledaño, junto al canal del río, y observa entre sus cúpulas verdes la alta Torre de la Televisión, otro emblema del skyline de la ciudad.

Como decía, una mañana es poco tiempo para todo lo que la Isla de los Museos puede ofrecer, así que aquí va un pequeño resumen de todos sus museos:
Picture
- Museo Antiguo (Altes Museum): edificio neoclásico del siglo XIX con exposiciones sobre mitos griegos, cultura antigua y excavaciones arqueológicas. Su mayor parte se dedica a la Grecia antigua y también al arte romano.
- Museo Nuevo (Neues Museum): el edificio terminó de reconstruirse de los daños de la guerra en 2009 y actualmente continua exhibiendo colecciones egipcias y prehistóricas. Su pieza más famosa es el Busto de Nefertiti.
- Galería Nacional Antigua (Alte Nationalgaleri): alberga una de las más grandes colecciones de pintura y de escultura del siglo XIX en Alemania.
- Museo Bode: con colecciones de escultura y arte de la tardo-antigüedad y bizantino.
- Museo de Pérgamo (Pergamonmuseum): uno de los más espectaculares con las reconstrucciones originales de edificios como el Altar de Pérgamo, la Puerta de Ishtar de Babilonia y la puerta del mercado de Mileto.
Probablemente el Museo Nuevo y el de Pérgamo estén entre tus preferencias, gracias a la enorme fama mundial con la que el busto de Nefertiti y el altar cuentan y lo importantes que han sido para la Historia del Arte. Disfrútalos con calma y sal de la Isla de los Museos para comer alguna de las diferentes variedades de salchicha que encontrarás en casi todas las calles. En cualquier caso, si te apetece algo rápido y rico que no sean las salchichas alemanas,  cruzando el canal del río y situándote frente al otro lateral de la Catedral de Berlín podrás comer unos enormes burritos en Wrap Me.
Picture
Para culminar el día, vamos a visitar la famosa East Side Gallery, pero antes daremos un pequeño paseo por uno de los barrios más encantadores y auténticos de Berlín. Se trata de Nikolaiviertel, muy cerca de la Isla de los Museos bajando por Spandauer Str., y el área más antigua de la ciudad, un barrio de calles medievales que conservan el encanto de su época de esplendor intacto. Es pequeño, se visita fácilmente y es un bonito lugar para pasear y tomar fotos alrededor de Nikolaikirche, la iglesia más antigua de Berlín, o el Ephraim-Palace, un palacio barroco del siglo XVIII.

Para llegar desde este pintoresco barrio hasta la East Side Gallery puedes caminar en un paseo de unos 20 minutos o tomar la línea roja del metro en Klosterstr. hasta Alexanderplatz y allí cambiar a la azul o la naranja hasta Warschauer Str. 

​East Side Gallery es la galería de arte al aire libre de mayor longitud y duración del mundo. Se levanta sobre una sección de 1.300 metros de restos de Muro de Berlín que fueron salvados del derribo y que fueron decorados tras dicho derribo por artistas internacionales con el fin de plasmar para la posteridad la esperanza y las ansias de libertad que llegaron con el fin de la guerra fría.
Picture
Dos días en una ciudad como Berlín saben a poco, pero esto es todo el tiempo del que disponemos. A estas alturas ya habrías sentido esa energía de la que hablaba, esa que rezuma en Berlín a través de sus heridas de guerra, casi en cada esquina. Culmina tu tarde en el bulevar TauentzienStrasse con la peculiar Iglesia del Recuerdo (Iglesia Memorial Kaiser Wilhelm), un templo que fue bombardeado y que nunca se reconstruyó y que hoy preside una zona comercial y de ocio cerca del barrio de Schöneberg, testigos de las aventuras y desventuras de personajes como Marlene Dietrich o Albert Einstein. ¿Se puede pedir más?


​Quizá te interese...

0 Comments



Leave a Reply.


    Tweets por @espressofiore
    Visit Pinterest's profile on Pinterest.


Powered by Create your own unique website with customizable templates.